Aversión al Riesgo: Lo que la Politización de Tesla Puede Enseñarte
El 10 de marzo de 2025, las acciones de Tesla se desplomaron un 15,5 %, cerrando en 222,15 $: su caída más pronunciada en un solo día en casi cinco años. Esta venta masiva siguió a una asombrosa caída interanual del 76 % en las ventas de Tesla en Alemania durante febrero, donde solo se vendieron 1.429 vehículos en todo el país.
¿La causa principal de este descenso? El respaldo público de Elon Musk al partido de extrema derecha alemán AfD durante las cruciales elecciones federales del país: un movimiento que politizó las acciones del fabricante de Silicon Valley y desencadenó una amplia reacción negativa en los mercados y más allá.
Las consecuentes caídas en ventas y valor de la acción reflejaron un cambio en la percepción del gigante de vehículos eléctricos. La marca pasó de ser vista únicamente como un producto a convertirse en un símbolo político, resultando en un ejemplo clásico de lo que llamamos la Politización de las Acciones.
¿Qué es la Politización de las Acciones?
En el clima emocionalmente cargado de hoy, el desempeño en el mercado de una empresa depende no solo de sus ganancias, sino también de las creencias políticas. Aunque no es un fenómeno nuevo, esta tendencia se ha intensificado en la década de 2020, un periodo en el que la percepción, la identidad y los valores pueden generar volatilidad con tanta fuerza como los pronósticos de beneficios.
DEFINICIÓN
La expresión «politización de las acciones» describe cuando una empresa o su liderazgo se vinculan públicamente a una ideología política, convirtiendo sus acciones en un símbolo divisivo. Las reacciones de los inversores entonces cambian de basarse en los fundamentos a estar impulsadas por el sentimiento emocional, motivado puramente por la identidad personal, los valores y la alineación social.
Quizás ningún otro tema sea tan controvertido como la política. Cuando una acción se politiza, el riesgo reputacional se amplifica, activando una de las fuerzas más poderosas del mercado: la aversión al riesgo.
¿Qué es la aversión al riesgo?
DEFINICIÓN
La aversión al riesgo es el impulso humano natural hacia la certeza. En el trading, este instinto es mayormente protector. Pero cuando se refleja en todo el mercado, puede convertirse en una fuerza que provoca ventas masivas.
Para reconocer cuándo una acción que te interesa está en peligro de formar parte de una venta masiva, debes entender a la perfección qué significa exactamente este proceso cognitivo. Después de todo, identificar la aversión al riesgo puede parecer fácil, pero no es una tarea sencilla.
Hace un año, nadie podría haber predicho que Tesla, una de las acciones más grandes del mundo, terminaría siendo un ejemplo claro de aversión al riesgo. Entonces, ¿qué pasó?
Navegando el mercado
Al abrir a $252.54, el 10 de marzo de 2025 parecía que Tesla seguiría dentro de su rango habitual de cotización, anticipando un día típico de operaciones. No hubo indicadores previos al mercado ni informes de analistas que pronosticaran algo preocupante.
Sin embargo, al cierre de la jornada, la acción terminó en $222.15, una caída del 15.4% impulsada por una intensa aversión al riesgo. Más de 130 mil millones de dólares en valor se esfumaron en cuestión de horas.
Mientras los mercados estaban bajo presión, con el Nasdaq 100 cayendo casi un 4% y el S&P 500 bajando un 2.7%, Tesla se destacó: su caída del 15.4% fue casi tres veces mayor que el promedio del sector tecnológico. La segunda mayor caída en tecnología ese día fue Nvidia con un descenso del 5.1%, seguida de cerca por Apple con un 4.9%. Ninguna otra acción tecnológica importante se acercó a estas cifras.
Contexto de la politización
Pero, de nuevo, ningún otro liderazgo en una acción se había visto tan profundamente involucrado en la política, generando una aversión al riesgo generalizada.
Aunque Elon Musk ya había incursionado en la política estadounidense como jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental durante la administración Trump, también adoptó una postura política inusualmente pública en las elecciones federales alemanas del 23 de febrero de 2025:
• Una publicación en X el 20 de diciembre de 2024 que decía que “solo la AfD puede salvar a Alemania”.
• Una conversación en directo con la candidata a canciller de la AfD, Alice Weidel, el 9 de enero de 2025.
• Una aparición sorpresa en video en un acto de campaña de la AfD en Halle el 25 de enero de 2025.
Consecuencias comerciales
Mientras que el mercado de vehículos eléctricos en Alemania creció un 53.5% en enero de 2025, tras el primer respaldo de Elon Musk a la AfD a finales de diciembre, las nuevas matriculaciones de Tesla en Alemania cayeron un 59.5%, reduciéndose a solo 1,277 unidades desde las 3,152 de diciembre.
A medida que el apoyo de Musk a la AfD se intensificó, en febrero las ventas de Tesla en Alemania se desplomaron aún más: un 76% interanual, marcando la caída más pronunciada en la historia de la compañía en ese mercado. Solo se vendieron 1,429 vehículos, frente a más de 7,700 del año anterior.
Considerando cómo el momento del desplome comercial de Tesla coincide con la politización de Elon Musk, así como los comentarios del profesor Martin Fassnacht, experto en marketing de WHU – Otto Beisheim School of Management, quien afirmó que “las ambiciones políticas de Musk han dañado la imagen de Tesla en Alemania”, resulta difícil imaginar que esta caída haya sido causada por algo distinto a la aversión al riesgo derivada de la politización del liderazgo de la acción.
Impacto en la acción
Con la Autoridad Federal de Transporte Motorizado de Alemania revelando cifras decrecientes de ventas de Tesla por segundo mes consecutivo el 5 de marzo, solo cinco días después, el experimentado analista automotriz de UBS, Joseph Spak, redujo su:
• Pronóstico de entregas para la compañía dirigida por Elon Musk, de 437,000 a 367,000 para el primer trimestre de 2025
• Estimación para todo el año a 1.7 millones de unidades, desde 2 millones
• Precio objetivo para la acción del gigante de vehículos eléctricos de $259 a $225, manteniendo una calificación de ‘Venta’
El informe revisado de Spak se publicó antes de la apertura de los mercados estadounidenses a las 9:30 am, hora del Este. Inmediatamente después de la apertura, la acción de Tesla comenzó a caer a medida que la aversión al riesgo se apoderaba del mercado. Para las 10:17 am ET, las acciones habían caído aproximadamente un 8.3%, cotizando alrededor de $240. La caída continuó durante todo el día.
Pero más allá de los números, se estaba produciendo un cambio más profundo: un giro psicológico en el mercado, impulsado nada menos que por la aversión al riesgo.
Dominar el comportamiento
La revisión a la baja en las expectativas de ventas por parte de Spak hizo más que ajustar cifras; desencadenó una aversión al riesgo generalizada. Para muchos operadores, provocó una ola de incertidumbre y precaución instintiva. En ese momento, la aversión al riesgo tomó el control.
¿Cuáles son los elementos de la aversión al riesgo?
La aversión al riesgo es una reacción profundamente humana. En esencia, refleja nuestro deseo natural de evitar el dolor y la incertidumbre.
La aversión al riesgo suele estar impulsada por tres fuerzas psicológicas principales:
Aversión a la pérdida: Nos hace sentir el dolor de las pérdidas el doble que el placer de las ganancias, a menudo llevándonos a salir demasiado pronto.
Aversión a la ambigüedad: Lo familiar se siente más seguro. Esto nos lleva a preferir riesgos conocidos sobre los desconocidos, incluso cuando lo desconocido podría ofrecer mayores beneficios.
Aversión al arrepentimiento: El miedo a tomar una decisión de la que luego nos arrepintamos. Es este arrepentimiento anticipado lo que genera vacilación y dudas.
Ejemplo de aversión al riesgo durante la caída de las acciones de Tesla
Cuando las acciones de Tesla comenzaron a caer el 10 de marzo, los traders reaccionaron al sentimiento general del mercado sobre el gigante de los vehículos eléctricos: caracterizado por incertidumbre, daño reputacional y posible arrepentimiento por mantener la acción.
La revisión del pronóstico de Spak no fue la única causa, pero sí el factor decisivo. Al publicarse el informe, amplificó el sentimiento subyacente ya existente, como:
Aversión a la pérdida
Además de la caída en ventas en Alemania, Tesla sufrió una fuerte caída en su segundo mercado más grande, China. En febrero de 2025, las ventas bajaron a 30,688 vehículos: un 51.5 % menos que los 63,238 de enero y un descenso interanual del 49.2 %.
Temiendo una caída aún mayor en el valor de las acciones del fabricante de Silicon Valley y motivados por una aversión al riesgo aumentada, la mayoría de los vendedores de acciones del gigante EV salieron dentro de la primera hora de negociación.
Aversión a la ambigüedad
El apoyo de Elon Musk al partido AfD en Alemania en diciembre de 2024 fue un shock, incluso para inversores familiarizados con la politización de su imagen en EE.UU. El movimiento añadió una capa de incertidumbre alrededor de Tesla, impulsada por su liderazgo cada vez más politizado, que parecía afectar las ventas de la empresa.
La perspectiva de una mayor politización creó incertidumbre e intensificó la aversión al riesgo, con muchos traders queriendo evitar la volatilidad que ahora acompañaba a poseer acciones de la compañía liderada por Musk.
Aversión al arrepentimiento
Al notar la caída en ventas en Alemania y China, así como la politización de Musk en Alemania y EE.UU., muchos accionistas de la empresa dirigida por Musk dudaron en mantener su posición, temiendo aferrarse a una acción en caída. Dentro de la primera hora de negociación, el precio de Tesla bajó un 8%, desencadenando una ola de ventas motivadas menos por los fundamentos y más por el doloroso pensamiento y la elevada aversión al riesgo de “debería haber vendido antes”.
Este no fue el primer ejemplo de aversión al riesgo inducida por la politización de una acción. Un episodio similar ocurrió dos años antes.
ESTUDIO DE CASO DE AVERSION DEL RIESGO: Bud Light y la caída de las acciones de AB in Bev (2023)
El 1 de abril de 2023, la marca de cerveza estadounidense Bud Light lanzó una breve campaña en las redes sociales protagonizada por la influencer transgénero Dylan Mulvaney. La campaña incluía un vídeo patrocinado en el Instagram de Mulvaney, en el que se mostraba una lata de Bud Light personalizada con su cara y se promocionaba el concurso «Easy Carry Contest» de Bud Light.
La politización de Bud Light
Lo que siguió fue una de las reacciones de los consumidores más intensas de la historia reciente. Figuras públicas conservadoras llamaron al boicot, tachando la asociación de politizada e ideológicamente divisiva:
El cantante de country Kid Rock publicó un vídeo en el que aparecía disparando a cajas de Bud Light en señal de protesta.
El cantante de country Travis Tritt anunció que «voy a eliminar todos los productos de Anheuser-Busch de la lista de hospitalidad de mi gira».
El músico de rock Ted Nugent se refirió a la asociación como «el epítome de la privación cultural».
Bud Light se había convertido en el símbolo de una guerra cultural. El núcleo de consumidores de la marca, tradicionalmente hombres de clase trabajadora del sur y el medio oeste de Estados Unidos (regiones social y políticamente conservadoras), reaccionó con rapidez.
En la semana que terminó el 8 de abril de 2023, una semana después del vídeo de Instagram de Mulaney, Bud Light experimentó una caída del 11% en las ventas en comparación con la misma semana de 2022. Una semana después, el 15 de abril de 2023, las ventas habían bajado un 21% interanual. Siguió un nuevo descenso de las ventas hasta el 23% en la semana que finalizó el 29 de abril.
Aversión al riesgo en el caso de AB InBev
El 10 de mayo, ante el descenso de las ventas, HSBC rebajó la calificación de las acciones de AB InBev de «Comprar» a «Mantener» en una nota interna de un analista. Redactada por Carlos Laboy, Director General del sector global de bebidas de HSBC, el analista citaba la «crisis de Bud Light» como principal motivo. Aunque no se hizo pública, varios medios de comunicación como CNBC y Fox Business se hicieron eco de la nota de Laboy.
En ese momento, conscientes de la reacción generalizada en torno a Bud Light y de una venta inminente, la aversión al riesgo se apoderó de los accionistas de AB In Bev. Ese mismo día, las acciones de AB InBev cayeron un 0,05%, de 65,94 a 65,91 dólares. Aunque mínima, fue el inicio de una venta masiva que se prolongó durante todo el mes.
El 31 de mayo, las acciones de AB InBev cerraron a 53,20 $, frente a los 66,39 $ del 31 de marzo, lo que representa un descenso del 20% en dos meses. Esta caída marcó el peor rendimiento mensual de AB InBev desde la pandemia de COVID-19 en marzo de 2020, cuando las acciones de la compañía cayeron un 23,2% hasta 41,83 dólares desde 54,45 dólares.
Diferencia con Tesla
Bud Light nunca se recuperó del todo de la polémica de 2023, y sus ventas y la percepción de su marca siguen muy dañadas. La marca de cerveza perdió su estatus de cerveza número 1 en América en favor de Modelo Especial, y aún no lo ha recuperado.
A pesar del golpe sufrido por Bud Light, la cotización de las acciones de AB InBev repuntó en mayo de 2025, cotizando en torno a 68,35 dólares, frente a los 66,39 dólares de marzo de 2023. AB InBev compensó las pérdidas de Bud Light con los mejores resultados de otras marcas mundiales, como Michelob Ultra y Busch Light. Después de todo, Bud Light es sólo una marca de la cartera de AB InBev.
A diferencia de AB InBex, que podría contar con una cartera de marcas diversificada, el destino de Tesla está totalmente ligado a un nombre y a una percepción.
La conquista de lo cognitivo
Cuando comienzan las ventas masivas por aversión al riesgo, rara vez se anuncian con una sirena. Más bien susurran a través de señales perdidas.
Si quieres detectar una venta impulsada por la aversión al riesgo antes de que ocurra, entrena tu mente para identificar estas dos corrientes psicológicas que suelen fluir bajo la superficie del comportamiento de otros traders:
Fallo al actualizar las creencias
Prueba social
¿Qué es el fallo al actualizar las creencias?
También conocido como perseverancia en la creencia, este proceso psicológico describe cuando alguien tiene dificultades para cambiar sus puntos de vista, incluso después de recibir evidencia clara y contradictoria.
En lugar de ajustarse, se aferran a lo que ya ‘saben’, a veces profundizando aún más conforme se acumulan los hechos.
Cómo identificarlo
Se reconoce cuando los precios de los activos resisten la realidad. A pesar de señales de alerta crecientes (como entregas en descenso, politización o fundamentos debilitados), los precios no se ajustan de inmediato. No porque las noticias no sean graves, sino porque demasiados traders aún se aferran a la narrativa de ayer.
Los analistas y comunidades de trading repetirán mantras familiares: ‘Tesla siempre se recupera’ o ‘el mercado está sobrerreaccionando’. Estos mensajes pueden ofrecer consuelo, pero no claridad, y retrasan decisiones necesarias.
Aunque los datos empeoren, las encuestas de sentimiento y las perspectivas de inversores pueden mantenerse extrañamente optimistas. Pero este optimismo no es confianza: es inercia (la mente resistiéndose al cambio). Y cuando la realidad finalmente se impone, las salidas no son estratégicas: son repentinas, emocionales y contagiosas.
PUNTO CLAVE:
Si notas que los traders se niegan a adaptarse mientras se acumulan factores de riesgo, podrías estar viendo en tiempo real cómo se manifiesta el fallo en la actualización de creencias.
Una venta motivada por aversión al riesgo podría no estar muy lejos.
¿Qué es la prueba social?
La prueba social es nuestra tendencia a seguir a los demás (especialmente en momentos de incertidumbre), confiando en que la mayoría sabe lo que hace. Se siente seguro. Una vez que se desvanece el fallo en la actualización de creencias y la incertidumbre comienza a aumentar, los traders con aversión al riesgo suelen encontrar consuelo en la multitud, observando lo que hacen otros y tomándolo como una señal de seguridad.
Esto es la prueba social en acción.
Cómo identificarla
Suele comenzar con salidas repentinas y agrupadas. Oleadas de traders cautelosos se retiran al mismo tiempo, saliendo de un activo en sincronía y reequilibrando hacia refugios seguros como el oro. Parece coordinado, pero no lo es. Es miedo colectivo disfrazado de estrategia: prueba social en acción.
Luego vienen las narrativas. Los foros se llenan de frases familiares: ‘Todos están saliendo’, o ‘Más vale prevenir que lamentar’. Los analistas las repiten, no siempre por claridad, sino por instinto. No son datos, son señales emocionales. Y cuanto más se repiten, más traders siguen el ejemplo, no por convicción, sino por consuelo.
Los indicadores de sentimiento se disparan. Herramientas como el Índice de Miedo y Codicia comienzan a oscilar de forma errática, pasando de codicia extrema a miedo repentino. No es porque los fundamentos del activo hayan cambiado de la noche a la mañana, sino porque las emociones sí lo han hecho.
PUNTO CLAVE:
Si notas que los traders se apresuran a salir del mismo activo al mismo tiempo, repitiendo narrativas emocionales mientras los fundamentos siguen estables, podrías estar presenciando la prueba social en acción.
Resumen con sabiduría ganadora
La caída de un día de Tesla el 10 de marzo de 2025 fue una reacción del mercado impulsada por un cambio psicológico grande y tardío. La politización de la marca provocó un fallo en la actualización de creencias entre los accionistas. Una vez que las consecuencias de esta politización se volvieron demasiado evidentes como para ignorarlas, la aversión al riesgo y la prueba social se combinaron, contribuyendo a la segunda mayor caída diaria en la historia del gigante de los vehículos eléctricos.
Como trader, tu mejor oportunidad de tomar decisiones exitosas al operar acciones radica en reconocer estos factores psicológicos antes de que generen acción y lleguen a los titulares.
Los mercados no se mueven por tus operaciones: se mueven por las de todos los demás. Para actuar con sabiduría, piensa en colectivo. Entra en la psicología de la multitud y adelántate manteniéndote consciente, atento y con claridad cuando otros no lo están.Si entiendes a la multitud, estarás mejor preparado para anticipar lo que podría suceder después.
Reflexiones finales
Después de tocar un mínimo de $217 el 10 de marzo de 2025, las acciones de Tesla parecen haberse recuperado, cotizando en torno a los $340 al momento de escribir esto, un alza de más del 57%: una señal alentadora para quienes buscan operar con Tesla.
Esta recuperación coincide con un cambio deliberado en la narrativa de marca política. Tras una mayor politización del título —incluyendo una sesión de fotos promocional en el jardín sur de la Casa Blanca el 11 de marzo, donde el presidente Trump y Elon Musk exhibieron los autos de Tesla, así como la continuidad de Musk en el gobierno estadounidense— el liderazgo de Tesla parece estar revirtiendo dicha politización:
El 20 de marzo, en la Gigafábrica de Texas, Musk declaró:
‘Si ves las noticias, parece el fin del mundo. No puedo pasar frente a la TV sin ver un Tesla en llamas’, seguido de: ‘Pero estoy aquí para decirles que el futuro es increíblemente brillante y emocionante’, sugiriendo un cambio de imagen. Cuatro días después, las acciones subieron aproximadamente 11.93%, cerrando en $278.39.
El 22 de abril, durante la llamada de resultados trimestrales, Musk anunció: ‘En mayo, reduciré significativamente mi tiempo dedicado a DOGE… dedicaré mucho más a Tesla’. Las acciones subieron alrededor del 5.37% al día siguiente.
El 20 de mayo, en un foro de Bloomberg en Doha, Musk anunció su intención de reducir significativamente su gasto político mediante donaciones, afirmando: ‘Creo que ya he hecho suficiente’, y ‘Actualmente no veo razón para seguir gastando en política’.
La recuperación de Tesla parece estar alineada con este giro narrativo. Los traders que se alejaron por aversión al riesgo en marzo parecen estar regresando, alentados por mensajes más claros y un aparente reenfoque en el negocio principal.
¿Pero será suficiente para borrar el daño causado por la politización? Las cicatrices políticas aún persisten. Sin embargo, este repunte demuestra que los mercados, como las personas, están dispuestos a perdonar cuando las acciones se alinean con el valor a largo plazo.
Por ahora, el fabricante de Silicon Valley podría estar dejando atrás la aversión al riesgo. Si mantendrá el rumbo dependerá no solo del rendimiento, sino también de la percepción. Y en el mercado actual, eso es la mitad del juego.
Aviso legal:
La información contenida en este artículo era precisa al momento de su redacción. Las condiciones del mercado y los datos económicos pueden cambiar rápidamente. Este contenido tiene fines informativos y no debe usarse como única base para tomar decisiones financieras.
El 10 de marzo de 2025, las acciones de Tesla se desplomaron un 15,5 %, cerrando en 222,15 $: su caída más pronunciada en un solo día en casi cinco años. Esta venta masiva siguió a una asombrosa caída interanual del 76 % en las ventas de Tesla en Alemania durante febrero, donde solo se vendieron 1.429 vehículos en todo el país.
¿La causa principal de este descenso? El respaldo público de Elon Musk al partido de extrema derecha alemán AfD durante las cruciales elecciones federales del país: un movimiento que politizó las acciones del fabricante de Silicon Valley y desencadenó una amplia reacción negativa en los mercados y más allá.
Las consecuentes caídas en ventas y valor de la acción reflejaron un cambio en la percepción del gigante de vehículos eléctricos. La marca pasó de ser vista únicamente como un producto a convertirse en un símbolo político, resultando en un ejemplo clásico de lo que llamamos la Politización de las Acciones.
